Seguro recuerdas ese primer atracón, ese momento cuando la comida dejó de ser solo comida y se convirtió en algo más. No estás sola en esto. Hoy voy a responder a eso que te preguntas tanto: "¿Por qué me dan atracones de comida?".
Te adelanto algunas de las causas más comunes para los atracones de comida: no comer suficiente, no priorizar el placer en tus comidas, restricción mental y falta de herramientas para regular emociones.
¿Y cuál es la solución? Volver a una alimentación intuitiva.
¿Recuerdas tu primer atracón?
Yo aún recuerdo mi primer atracón, una caja entera de flips y un pan de maíz completo. Una vez que empecé, no pude detenerme hasta que todo se acabó. Y entonces, la desesperación me invadió, creyendo que no podía confiar en mí misma con la comida, que el problema era YO, mi falta de control y voluntad.
Años después de ese primer atracón, he aprendido que el problema nunca fui yo. Mi cuerpo siempre ha sido sabio y, por más incómodo e inconveniente que haya sido el atracón, me estaba tratando de decir algo.
Ahora sí, ¿por qué me dan atracones de comida?
1. No comer suficiente para tu cuerpo
La primera raíz es la de no comer suficiente cantidad para tu cuerpo. El gran problema aquí es que mucha subestiman la cantidad de necesitan y creen que su cuerpo debería sostenerse con cantidades que apenas sirven para un bebe o adolescente.
Entonces, lo que pasa es como cuando aguantas la respiración durante demasiado tiempo; tarde o temprano, necesitas respirar y jadear.
Así mismo, si no le das a tu cuerpo la cantidad de energía que necesita, eventualmente buscará una oportunidad para recuperar lo que le falta.
Aquí es donde llega el atracón, y sientes una urgencia y antojos por comer en exceso. Es tu cuerpo intentando obtener la energía que le ha faltado ese día o durante varios días. Es tu cuerpo protegiéndose de la restricción.
2. Reglas y juicios con la comida (Restricción Mental)
Si alguna vez has pensando en términos de "bueno" y "malo" con la comida o te has puesto condiciones, entonces estas experimentando restricción mental.
No importa si físicamente te estás permitiendo comer algo, si al momento de hacerlo estas pensando en "esto no lo debería o puedo comer" entonces para tu cuerpo es como si lo estuvieras privando de comida (como en el punto anterior).
Una vez más, en ese intento por liberarte de la restricción llega el atracón. Comer alimentos que consideras como "prohibidos" se convierte en un acto de rebelión contra esas reglas mentales.
4. Falta de placer en el plato = atracones de comida
La comida es más que simplemente combustible para nuestro cuerpo. Debería ser una experiencia placentera, un momento para satisfacer tanto nuestras necesidades físicas como emocionales.
Sin embargo, en esta cultura llena de "deberíamos" comer, es fácil perder de vista esta experiencia.
Si eliges qué comer basado en reglas rígidas, siguiendo un plan o pensando en calorías en lugar de saborear y disfrutar, entonces estás luchando con esta raíz.
Cuando la comida se convierte en una tarea, algo que simplemente tienes que hacer para cumplir con ciertos estándares, tu cuerpo una vez más puede rebelarse. Los atracones pueden surgir como una forma de recuperar el placer y la satisfacción que has estado negando.
Por ejemplo, recuerdas aquel día en que tenías ganas de comer un chocolate y en vez de eso comiste unas almendras o una fruta solo para más tarde terminar comiendo el triple de chocolate.
5. Falta de herramientas para lidiar con emociones
Somos humanos, sentimos una amplia variedad de emociones, y a menudo recurrimos a la comida como consuelo, distracción o celebración. Esto no tiene nada de malo.
Este último tipo de atracón puede ser una respuesta automática ante emociones incómodas, como el estrés, la tristeza o la ansiedad. Es como si tu mente desconectara momentáneamente de tus acciones, y en un afán de no sentir eso incómodo usas la comida para evadirlo.
Lo anterior es muy diferente a reconocer lo que estas sintiendo y decidir usar alguna comida para atravesarlo, manteniendote en el presente. A esto es a lo que yo llamo hambre emocional, que es consciente y no te deja con sentimiento de culpa.
¿Cómo acabar con los atracones de comida?
Las soluciones para cada una de estas raíces son varias y requieren un enfoque integral que involucre a tu mente, cuerpo y emociones. Además, es muy común que si sufres de atracones tengas un poco de todas las raíces (yo personalmente las tenía todas)
Así, una de las mejores estrategias para abordar estas raíces y encontrar una relación más tranquila con la comida es adoptando una alimentación intuitiva.
Alimentación intuitiva: la solución a tus atracones
La alimentación intuitiva es un enfoque que te guía para conectarte nuevamente con las señales de tu cuerpo, tus emociones y tus necesidades nutricionales.
En lugar de depender de reglas externas o restricciones rígidas, aprendes a escuchar lo que tu cuerpo realmente necesita y a honrar esas señales. Con este enfoque abordas las raíces de los atracones de manera integral.
Cuando te permites comer lo que realmente deseas, sin juicios ni restricciones, experimentas el placer y la satisfacción genuina en cada bocado. Dejas de pensar en términos de "bueno" y "malo" en relación con los alimentos y, en cambio, te enfocas en cómo te hace sentir y cómo contribuye a tu bienestar general.
Esto elimina la restricción mental y la obsesión por los alimentos prohibidos, lo que a su vez reduce la probabilidad de caer en atracones porque ya no hay reglas contra las que quieras rebelarte.
Además, la alimentación intuitiva te brinda herramientas efectivas para manejar tus emociones sin recurrir a la comida. Aprendes a reconocer las emociones que pueden llevar a los atracones y a buscar estrategias saludables para lidiar con ellas.
Esta habilidad no solo te ayuda a evitar los atracones, sino que también mejora tu bienestar emocional en general.
Recuerda que no estás sola, son muchas las personas que atraviesan estos atracones cada día por estos mismos motivos.
Si te sientes abrumada por los atracones y deseas un apoyo personalizado en sanarlo estoy aquí para ayudarte. Te proporcionaré las herramientas y el apoyo necesario para liberarte de los patrones restrictivos, encontrar el equilibrio y disfrutar de una alimentación flexible y placentera.
Aprenderás a nutrir tu cuerpo de manera saludable, honrar tus señales internas y encontrar la paz con la comida. Reserva una cita conmigo y déjame acompañarte.
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